viernes, 1 de julio de 2011

MERLUZA EN SALSA VERDE PARA DIABETICOS

MERLUZA EN SALSA VERDE PARA DIABETICOS



MERLUZA EN SALSA VERDE





INGREDIENTES


  • 600 grs. de filetes de merluza
  • 500 grs. de mejillones
  • 200 grs. de cebollinos
  • 20 grs. de harina
  • 2 cucharadas soperas de aceite
  • 2 cucharadas de estragón picado
  • 100 cc de vino blanco seco
  • Pimienta
  • Sal

ELABORACIÓN
Limpiamos los mejillones y los introducimos en una 
cazuela con vino blanco, calentándolos a fuego suave 
hasta que se abran. 


Les quitamos las conchas y colocamos el caldo de 
cocción para reservarlo.

En la misma cazuela agregamos el caldo colado y le



añadimos unos granos de pimienta. 


Sazonamos el pescado y lo introducimos en la cazuela, 
la tapamos y dejamos que se cueza durante 10 minutos. 


Retiramos del fuego el pescado.

Llevamos el caldo al punto de ebullición. 



Le añadimos el cebollino y el estragón picado y triturado.

Tostamos la harina con el aceite, incorporando el caldo 

con el cebollino y cuando reduzca agregamos los mejillones.

Servimos el pescado con la salsa.


APORTE POR PERSONA
  • Hidratos de carbono: 8 grs.
  • Proteínas: 27 grs.
  • Grasas: 9 grs.
  • Kcal: 221






sábado, 25 de junio de 2011

La Pasuchaca lo nuevo contra la Diabetes



Es un remedio muy eficaz contra la diabetes. Se han realizado experimentos en conejos que han determinado una eficaz disminución de azúcar en la sangre (hipoglicemia) que mantiene sus efectos por 7 a 8 horas.

En los seres humanos se usa hace muchos años en la sierra, sin que se produzcan efectos tóxicos colaterales.
Se utilizan las hojas secas, con las que se prepara un cocimiento de 5 a 10 minutos, el mismo que se debe tomar cada 8 horas.


Descripción botánica
  • La planta es inherente, acaule, silvestre que crece en forma espontánea.
  • La raíz es típica o pivotante.
  • Las hojas son basales pubescentes, sostenidas por peciolos (21 mmde largo), alternas, palmatipartidas en 7, dentibuladas. Los lóbulos ampliamente cuneados - abovados. Los 3 lóbulos de en medio tridentadas y los 4 lóbulos laterales bicentadas con estípulas pubescentes concrescentes, corolino de 13 mm de largo.
    Inflorescencia en umbela, pedúnculo, floral de 10 mm de largo.
  • Flor: periantica, diclamidea, heteroclamidea, hermafrodita, actinomorfa. Presenta en su base 5 verticilos de bracteas conolenas.
  • Su fruto es un esquizocarpico de tipo regma que procede de un gineceo pluricarpelar con muchos estilos soldados entre sí, pero al madurar el fruto se separa cada uno con el correspondiente carpelo.

Composición química

Esta especie contiene las siguientes sustancias: glicósidos (cianogenéticos, anticiánicos, antraquinónicos y saponínicos), gomas, mucílagos, taninos, saponinas, clorofila, grasas, esencias, ceras, resinas, flavonoides, carotenoides, azúcares reductores.


Modos de acción

La Pasuchaca es considerada como la especie vegetal con mayor efecto hipoglicemiante por lo que es recomendado en el tratamiento de ciertos tipos de diabetes. Parece estar relacionado con el efecto producido por los hipoglicemiantes orales del tipo de las guanidas, que a diferencia de los hipoglicemiantes del tipo sulforileas, producen un descenso de los niveles de glucosa en animales diabéticos y actúan también en la diabetes juvenil grave, empleándose junto a la insulina.

Puede interferir en la unión de la insulina a las proteínas plasmáticas dando como resultado una hormona libre y activa.

Aumenta la utilización periférica de la glucosa o incrementa la captación de la glucosa por el músculo e inhibe la gluconeogénesis hepática aumentada en los diabéticos o aumenta la recepción de la insulina a sus receptores, considerando que la insulina no ejerce efecto, para el transporte de la glucosa, sobre ciertas células como las del epitelio tubular del riñón, no hace suponer que la pasuchaca impide la reabsorción de glucosa a través del epitelio tubular, de ser así, se eliminarían mayores concentraciones de glucosa en la orina que las presentadas en las condiciones fisiológicas de los diabéticos.


Indicaciones terapéuticas

Las principales propiedades medicinales atribuidas a la pasuchaca son: antidiabético, hipoglicemiante y depurador de la sangre; así mismo, se le considera un fuerte astringente, se suele emplear para combatir diarreas crónicas, cólera infantil, hemorragias, inflamaciones de la garganta y úlceras bucales.

En la medicina homeopática se recomienda, además de los casos ya mencionados, en las blenorragias, diabetes, hemoptisis, menorragias, úlceras de las mamas y atonías del estómago y laringitis.


Estudios clínicos

Se han llevado estudios en el Instituto Nacional de Salud, en cuanto a medir el efecto hipoglicemiante de la pasuchaca en conejos con diabetes experimental tratados con extracto acuoso de Geranium delsianum Knuth, administrando una hora antes de cada determinación de glucosa (dosis de 10 g/kg p.c.); observándose que la baja de glicemia empieza a la primera hora, acentuándose a la cuarta hora y manteniéndose a la séptima.

Estos estudios revelaron que el extracto acuoso produjo un efecto hipoglicémico al ser administrado por vía oral a conejos diabéticos (por acción del aloxano). Este efecto fue corto y un poco menor a dosis única de 5 g/kg p.c. que a dosis de 10 g/kg p.c. con la que llegó a alcanzar el máximo efecto hipoglicemiante cuatro horas después de la administración del extracto.

Al administrar la droga cada dos horas (una antes de cada determinación de la glicemia), se verificó que la hipoglicemia persiste hasta la séptima hora, siendo más significativa con la dosis de 10 g/kg p.c.


Toxicidad aguda

Se han efectuado estudios de toxicidad aguda, administrando extracto acuoso por vía oral mediante sonda metálica a ratones con ayuno de 14 horas; primero se buscó por tanteo la dosis aproximada (20, 30 y 100 g/kg p.c.) que determina el efecto de un pequeño número de animales, luego se procedió a hacer un ensayo de animales (10 ratones por grupo) observándose la mortalidad en cada dosis empleada por un período de 7 días, sobre cuyos resultados se practicaron los cálculos estadísticos a fin de determinar la DL50 exacta.

La dosis de 20 g/kg p.c. administrada al primer grupo no produjo muertes, en el segundo con la dosis de 30 g/kg p.c. se produjo el 10% de muertes. El porcentaje de mortalidad aumenta con el incremento de la dosis de 50 g/kg p.c. La DL50 corresponde a 35 g/kg p.c.

Después de cada administración de la droga y especialmente con las mayores dosis se observó primero la fase de excitación con aumento de la frecuencia respiratoria, por aproximadamente 20 minutos, luego viene una fase de depresión disminuyendo la actividad espontánea y la reacción de alarma, y aumento de la pasividad; posteriormente algunos experimentaron convulsiones seguidos de una muerte lenta. En la disección de los ratones se observó distensión intestinal.

Referencia tomada de: http://www.alimentacion-sana.com.ar/nuevo/actualizaciones/pasuchaca.htm

domingo, 19 de junio de 2011

Todo sobre la resistencia a la insulina

Todo sobre la resistencia a la insulina

La resistencia a la insulina es una condición que aumenta sus probabilidades de desarrollar diabetes tipo 2 y enfermedades del corazón. 

Cuando usted padece de resistencia a la insulina, su cuerpo tiene problemas para responder a esta hormona. 

Con el tiempo, los niveles de glucosa (azúcar) en su sangre suben más de lo normal. 

La buena noticia es que si reduce la cantidad de calorías, si agrega la actividad física a su rutina diaria y si baja de peso puede dar marcha atrás a la resistencia a la insulina y reducir sus posibles riesgos de padecer de diabetes tipo 2 y de enfermedades del corazón.


¿Cuál es la función de la insulina?

La función de la insulina es ayudar a que el cuerpo use la glucosa y la transforme en energía. 

Es una hormona, uno de los químicos que su cuerpo hace para ayudar a hacer o regular los procesos dentro de él. 

La insulina es producida por el páncreas, que es un órgano que se localiza debajo de la parte inferior del estómago. 

Generalmente, su páncreas produce sólo la cantidad necesaria de insulina para ajustarse a la cantidad de alimentos que usted come.

La insulina actúa como el portero de entrada a las células. 

La comida llega a la puerta de la célula en forma de glucosa de la sangre. 

Cuando su insulina está trabajando bien, ésta abre la puerta, igual que un portero. 

Entonces, la glucosa entra a la célula en donde se transforma en energía.

Cuando usted padece de resistencia a la insulina, sus células no responden a esta hormona—ellas se resisten a recibir órdenes de la insulina—y la insulina no puede hacer su trabajo. 

Aún así, la glucosa en la sangre llega a la puerta de la célula, pero la insulina no puede trabajar eficazmente, y la puerta que lleva a la célula no se abre. 

Su páncreas trata de normalizar sus niveles de glucosa en la sangre mediante la producción de más insulina. 

Al principio, la insulina extra ayuda. 

Pero después de un tiempo, incluso la insulina extra no abre las puertas de las células y su glucosa puede aumentar.

Si el nivel de su glucosa está alto, puede ser que padezca de pre diabetes o, incluso, de diabetes.


¿Cuáles son los factores de riesgo para padecer de resistencia a la insulina?

Usted tendrá mayores probabilidades de padecer de resistencia a la insulina si:

• Tiene sobrepeso 

• No hace actividades físicas.

• Es una mujer con medida de cintura al nivel del ombligo de 35 pulgadas, o es un hombre con una medida de cintura de más de 40 pulgadas.  

• Alguno de sus padres, hermanos o hermanas padece de diabetes tipo 2.

• Tiene síndrome de ovario policístico. 

• Tiene más de 45 años.

• Su presión de la sangre es mayor de 140/90 mm Hg.

• Sus niveles de colesterol HDL (bueno) están bajos (35 mg/dl o menos).

• Sus niveles de grasa conocida como triglicéridos están altos en su sangre (250 mg/dl o más).

Todos estos factores lo colocan en riesgo de padecer enfermedades del corazón.


¿Cómo se diagnostica la resistencia a la insulina?

En este momento, no existe un examen que comúnmente se use en el diagnóstico de la resistencia a la insulina.

Las personas que padecen de este trastorno generalmente no presentan síntomas. Su doctor puede examinar sus factores de riesgo y considerar si existe la probabilidad o no de que usted padezca de resistencia a la insulina. 

Si usted tiene un factor de riesgo para la resistencia a la insulina, su doctor debe examinar sus niveles de glucosa en ayunas para verificar si tiene pre-diabetes o, incluso, diabetes.

¿Cómo puedo prevenir o dar marcha atrás a la resistencia a la insulina? 

Usted puede disminuir la cantidad de calorías y mantenerse físicamente activo. 

Si lo hace, es más probable que baje de peso. Recuerde, no tiene que perder mucho peso; incluso 10 libras le pueden ayudar.

Debe auto-planificarse como un compromiso para reducir las calorías de la siguiente forma:
  • Reduciré el tamaño de las porciones que siempre como.
  • Ordenaré un tamaño de porción más pequeña cuando coma fuera de casa. O bien, compartiré el plato de comida.
  • Probaré las bebidas sin calorías o el agua pura en lugar de las bebidas de soda regulares y el jugo.
  • Probaré las versiónes con menos grasa de los alimentos que siempre como. Revisaré las etiquetas para asegurarme de que las calorías también están reducidas.
  • Preferiré las comidas asadas y cocidas al vapor en lugar de las fritas.
  • Comeré más vegetales y alimentos integrales.
  • Pediré las salsas con grasa y los aderezos "servidos por aparte" y usaré la menor cantidad posible.
  • Usaré cacerolas que no se peguen o aceites en aerosol. 
  • Disminuiré la cantidad de ingredientes con mucha grasa que se utilizan para sazonar los platillos, como mantequilla, margarina, crema agria, aderezo regular para ensaladas, mayonesa y salsas grasosas. 
  • En lugar de estos, sazonaré mi comida con crema de barbacoa, salsa de tomate, jugo de limón u otras opciones bajas en grasa.
  • Mantendré en mi cocina  los bocadillos bajos en calorías y grasas. Escogeré las porciones pequeñas.




Compromiso para mantenerse físicamente activo


  • Usaré las gradas en lugar del elevador.
  • Caminaré en los alrededores mientras hablo por teléfono.
  • Encontraré una actividad que me guste hacer, como bailar, arreglar el jardín o jugar con los niños.
  • Me mantendré activo en la casa al trabajar en el jardín y al lavar el automóvil.
  • Me levantaré a cambiar de canal en la TV
  • Sacaré a caminar al perro.
  • Dejaré mi automóvil en el otro extremo del estacionamiento del centro comercial y caminaré a las tiendas.
  • En la tienda de abarrotes, caminaré por todos los pasillos.
  • Después del almuerzo haré una caminata enérgica aumentando hasta caminar por 30 minutos, 5 días a la semana. O bien, dividiré los 30 minutos en 2 ó 3 caminatas.
  • Probaré el entrenamiento de fortaleza física levantando pesas livianas varias veces a la semana.



¿Afecta la resistencia a la insulina a las personas que ya padecen de diabetes tipo 2?

Sí, la resistencia a la insulina generalmente comienza antes que la diabetes tipo 2 sea diagnosticada, y continúa haciéndole más difícil la tarea de alcanzar sus objetivos para la glucosa en la sangre. 

Si usted padece de diabetes tipo 2, puede luchar contra la resistencia a la insulina reduciendo las calorías, haciendo actividad física y perdiendo peso, si es que lo necesita. 

Hable con el equipo de profesionales que cuida su salud sobre las diferentes formas de alcanzar sus metas por medio de las comidas, la actividad física y las medicinas.

American Diabetes Association
1–800–DIABETES (342–2383) www.diabetes.org
©2005 by the American Diabetes Association, Inc. 07/05



sábado, 4 de junio de 2011

Nutrición y embarazo

Una alimentación adecuada durante la gestación en las mujeres con diabetes y en las mujeres que durante el embarazo desarrollan una diabetes gestacional contribuye a prevenir problemas asociados al desarrollo del feto, como pueden ser: alteración del peso, talla, menor resistencia a las infecciones, partos prematuros o malformaciones congénitas. Así mismo, ayuda a prevenir problemas asociados con la evolución de las complicaciones crónicas de la diabetes.


Debe prestarse mayor apoyo nutricional si ha existido un embarazo previo con poca diferencia de tiempo, si la mujer con diabetes presenta obesidad, si hay embarazo gemelar o si la edad de la embarazada es baja.


Tampoco hay que olvidar algunas situaciones frecuentes durante el embarazo que pueden requerir modificaciones en las pautas dietéticas habituales, como son:
  • El Epulis: es una situación en la que las encías se ablandan y sangran ante pequeños traumatismos, como el cepillado dental. En estos caso es importante realizar una esmerada higiene dental, realizándola incluso en las tomas de media mañana y merienda.
  • Las náuseas y los vómitos: suelen ser habituales en los primeros meses de la gestación. Se debe disminuir el contenido de las grasas en la dieta, realizar las seis tomas de la dieta habitual y evitar los alimentos que tengan un olor fuerte. Se debe aumentar el consumo de agua.
  • La pirosis: es la regurgitación del contenido gástrico hacia el esófago, suele ser habitual al final del embarazo, por presión del feto y relajación del esfínter gastroesofagico. Se debe evitar tener posiciones tumbadas después de las comidas, evitar los alimentos que endentecen el vaciado gástrico, como las grasas y el café. La cena se debe realizar tres horas antes de acostarse.
  • El estreñimiento y las hemorroides son problemas que surgen o se agravan durante el embarazo. Para luchar contra ellos se debe aumentar el consumo de alimentos ricos en fibra como verduras, frutas y cereales integrales, así como beber abundante agua. También es útil la realización de ejercicio moderado, sobre todo caminar, para favorecer los movimientos intestinales. Por su parte las hemorroides mejoran corrigiendo el estreñimiento y evitando el abuso de grasa, picantes y especias.
El consumo de tabaco está contraindicado en general en todas las personas con diabetes por su implicación en la evolución de las complicaciones crónicas de esta, pero en el caso de las mujeres con diabetes embarazadas, el consumo de tabaco trae unas implicaciones nutricionales que pueden afectar a la madre y al feto.


El tabaco durante el embarazo produce en la mujer problemas nutricionales como son una disminución de los niveles de ciertos nutrientes fundamentalmente de folatos, vitamina C y B12. En el feto pueden producir alteraciones del peso relacionadas con su edad gestacional, peores tests de control al nacer y en algunos casos alteraciones de la función cognitiva del niño en etapas posteriores de su vida.

Alimentación y deporte

(Iosu Feijoo, alpinista que coronó el Everest, con diabetes).

En la actualidad hay ciertos tópicos sobre los cambios que se debe realizar en la alimentación de cualquier persona que practica deporte de forma continuada, incluyendo las personas con diabetes. 


Estos tópicos deben ser desmitificados. 


No hay ninguna dieta, ni ningún alimento que convierta a una persona en campeón. 


Cada diabético que practique deporte de forma habitual debe seguir unas normas nutricionales de acuerdo con sus características y con el tipo de deporte que practique.


Hay una serie de cambios nutricionales que se asocian a la practica del deporte que van a beneficiar a todas las personas que practiquen el ejercicio físico. 


Por ejemplo, disminuir la tendencia a la obesidad y una mejora en los hábitos alimentarios, lo que ayuda a una mejor elección de los alimentos más adecuados. 


El bienestar que produce la práctica del ejercicio físico, ayuda a realizar una nutrición más correcta.


Vamos a analizar los elementos que constituyen el aporte nutricional de la dieta y comenzaremos por el Gasto Energético o Calórico


En las personas que practican deporte, el gasto calórico es muy superior a las personas que llevan una vida sedentaria. 


El gasto varía mucho de un deportista a otro en función del tipo de deporte, intensidad con que se practica, condiciones ambientales y entrenamiento previo, por eso lo ideal es calcular las calorías diarias de forma individual contando todas las actividades que realiza cada persona diariamente. 


De forma general podemos decir que la persona que realiza como mínimo una práctica deportiva durante al menos noventa minutos diarios, tiene unos requerimientos energéticos de 50 Kcal./Kg./día en el caso de los hombres, y entre 45 a 50 /kcal/Kg/día en las mujeres.


Seguimos con los Nutrientes. Hablaremos en primer lugar de las proteínas al ser éste el macronutriente más mitificado entre los deportistas, especialmente entre las personas que practican el culturismo, pues se ha creído que una ingesta alta de proteínas producía un aumento de la masa muscular, por lo que el consumo de alimentos proteicos e incluso de suplementos ha estado muy extendido entre los deportistas. 


Este error hay que desmitificarlo pues durante la práctica del ejercicio físico el músculo consume glicógeno (que el reservorio de glucosa que tiene el organismo) y ácidos grasos y la proporción de proteínas que se queman es una proporción insignificante. 


El principal condicionamiento del desarrollo del músculo es el entrenamiento. 


Otro error nutricional extendido entre los deportistas es el de que las proteínas que se ingieren con la dieta se depositan como proteínas en el organismo. Y no valoran que el consumo excesivo de proteínas se asocia con peligros para la salud, por el hecho de obligar a trabajar más al hígado y al riñón, condicionando un aumento de la pérdida de calcio de los huesos y una mayor excreción de orina, que puede contribuir a la deshidratación.


En general las necesidades proteicas de los deportistas son ligeramente más altas que el resto de la población, así en general en la dieta de la persona con diabetes la ingesta de proteínas no debe ser superior al 10-20 % del total de las calorías diarias, en las personas que practican el deporte la ingesta de proteínas puede ser desde el 1.4 a 2 gr./Kcal./día.


Consumo de alimentos proteicos que se deben modificar en la dieta de los deportistas:
  • Carne y derivados: Consumo normal o algo superior.
  • Pescado y mariscos: Consumo normal o algo superior.
  • Huevos: Consumo normal o algo superior.
  • Leche y lácteos: 3 ó 4 raciones al día.


Continuando con las indicaciones nutricionales de la práctica del deporte y la diabetes nos quedan comentar aspectos sobre los hidratos de carbono, las vitaminas, losminerales, los líquidos y los electrolitos.


Hidratos de carbono: En todo tipo de actividad física y deporte, independientemente de si es asociado, de duración prolongada o de ejercicios cortos e intensos, se relaciona el rendimiento con la reserva de glicógeno muscular. 


Tomando una dieta que siga las indicaciones de las normas nutricionales de la persona con diabetes, se cumplen las indicaciones de ingestas de hidratos de carbono de la dieta de los deportistas ya sean de élite, o personas que simplemente buscan una mejoría en su salud.


La dieta de la persona con diabetes es similar a la del deportista pues debe ser rica en hidratos de carbono, entre un 55 y un 60% de las calorías totales. 


En estas condiciones se consigue una mayor reserva de glicógeno muscular.


La mayor parte de los hidratos de carbono deben ser aportados por cereales, verduras, hortalizas y frutas.


Vitaminas y minerales: En general con la práctica del ejercicio físico también se produce un aumento de las necesidades energéticas. 


Esto implica que debe aumentarse la ingesta de todas la vitaminas cuyo consumo está relacionado con el aporte de energía, como son todas las vitaminas del grupo B. 


También la práctica del deporte produce en el cuerpo humano un aumento en la producción de radicales libres, resultado de un aumento de la oxidación por la actividad física. 


Por este motivo debe aumentarse el consumo de las vitaminas y los minerales con cierto carácter antioxidante como son: vitaminas C, E y beta carotenos. 


Los minerales cuyo consumo debe aumentar son: zinc, cobre y selenio. Sin embargo la suplementación masiva con vitaminas no supone ningún beneficio y puede asociarse a efectos indeseables.


Líquidos y electrolitos: Durante el ejercicio físico se pierden grandes cantidades de líquido por el sudor. Esto puede producir deshidratación y disminución del rendimiento físico. No se debe esperar a tener sed para beber, porque el ejercicio físico retrasa la aparición de la sensación de sed. 


Se recomienda beber 2 vasos de agua antes de comenzar el ejercicio físico, si éste es intenso un vaso cada 15 minutos y otros dos al acabar la actividad física. Al referirnos a los electrolitos hablamos del sodio, cloruro, potasio y algunos minerales como magnesio, calcio y zinc que se pierden con el sudor. Por lo que se deben aportar al beber el agua.


Debe evitarse el consumo de alcohol, por su acción sobre el sistema nervioso, por aportar calorías huecas que aumentan las necesidades de otros nutrientes y sobre todo por la acción diurética que favorece la deshidratación.


Es un error sudar como medida encaminada para perder peso, pues sólo produce deshidratación con todo el riesgo que esto conlleva para la vida diaria de la persona con diabetes.

La alimentación en la tercera edad





En el ámbito de nuestra vida cotidiana, y en del propio entorno sanitario, cada día tiene más importancia la atención en la alimentación de las personas mayores.

Fundamentalmente se debe a un aumento de este colectivo en los países desarrollados, que en algunos casos está alcanzando el 20 % del total de la población, y a una mayor sensibilización individual y social hacia este grupo más vulnerable. 


Esto, centrándolo en el entorno de la diabetes, es todavía más importante, pues según los últimos estudios epidemiológicos, en España, a partir de los 65 años, el 25% de la población presenta alteraciones en el metabolismo de los hidratos de carbono, ya sea diabetes o intolerancia a los hidratos de carbono. Ambas situaciones precisan un apoyo nutricional y, en algunos casos, un cambio en los hábitos nutricionales previos.

El interés de la nutrición en diabéticos mayores debe ir dirigido a responder a los siguientes apartados:
  • Evitar la aparición de hipo o hiperglucemias.
  • Evitar la malnutrición. Ésta tiene una prevalencia alta en el subgrupo de mayores de 70 años.
  • Encontrar normas nutricionales que permitan mantener el buen control metabólico, pero respetando la calidad de vida.
  • Encontrar posibles causas producidas por los cambios fisiológicos de los años y de las alteraciones derivadas del entorno social, que alteren el cumplimiento de las normas nutricionales.


Hay una serie de cambios fisiológicos que pueden afectar a la alimentación como:
  • Pérdida de la palatabilidad con un descenso de la sensibilidad para poder apreciar los sabores dulces y salados. Si a esto unimos un deterioro del olfato, hace que los ancianos para saborear ciertos alimentos los tomen o demasiado dulces o demasiado salados, ambos temas importantes para la diabetes. El primero, al no poder tomar los dulces habituales, lleva a que se utilicen edulcorantes, que en algunos casos como la sacarina deterioran su sabor (sabor metálico) o sorbitol, con el consiguiente riesgo de padecer procesos diarreicos. El problema con los demasiados salados es que deterioran otros procesos frecuentes en estas edades como hipertensión, insuficiencia cardiaca, etc.
  • También hay una distorsión de la percepción de los colores, con pérdida del espectro de los azules. Así para preparar un menú que les sea atractivo debemos usar combinaciones de colores verdes-rojos, verde-naranjas en la combinación de los alimentos que forman los distintos ingredientes de los platos.
  • Es frecuente encontrar que las personas mayores tengan problemas para poder masticar, que van desde falta de piezas o de dentadura completa, hasta tener mala oclusión (no encajan correctamente la dentadura superior con la inferior dificultando la masticación). Cualquiera de estas alteraciones dificulta el proceso digestivo haciéndolo más costoso.
  • Es frecuente que también aparezcan disminuciones en las secreciones digestiva. Esto puede ocasionar déficit de proteínas, de hierro, de calcio, de los folatos y de la vitamina B6. También es frecuenté el estreñimiento.
  • Las necesidades acalóricas disminuyen entre un 2 y un 5 % por cada década a partir de los 60 años, debido a la pérdida de la masa muscular, disminución actividad física y otros cambios varios.


Guías dietéticas para la tercera edad:

  • Menús sencillos y de fácil preparación.
  • Presentación vistosa y agradable de los platos.
  • Realizar las tomas de alimentos diariamente.
  • Repartir la comida en 5 o 6 tomas.
  • Moderar el consumo de sal.
  • No abusar de bebidas alcohólicas y/o estimulantes.
  • No usar condimentos fuertes.
  • Moderar el consumo de la sal.
  • Beber agua entre 1 ½ a 2 litros día.


NO DEBEMOS OLVIDAR QUE LA COMIDA PARA LAS PERSONAS MAYORES ES UN ACTO DE CONVIVENCIA Y DE RELACIÓN SOCIAL.

Riesgos asociados a los factores generacionales:

  • Malos hábitos alimenticios al existir costumbres nutricionales con errores difíciles de modificar que a veces ocasionan que la dieta que aportamos a las personas mayores sea monótona.
  • Inapetencia acompañada de la despreocupación a menudo propia de las personas mayores y que se relaciona con todo lo referente a su cuidado personal.
  • Aspectos económicos que influyen a veces en planteamientos erróneos de la alimentación diaria ya por exceso o defecto.
  • Dificultades derivadas de algunas enfermedades, que van a producir una disminución de la autonomía de la persona mayor repercutiendo en la adquisición, transporte y preparación de los alimentos.
  • Aislamiento social, dietas alternativas, dietas muy restrictivas y alcoholismo.
  • La polimedicación (tener que usar varios medicamentos diariamente) ésta puede producir interacción con ciertos nutrientes y provocar cierto déficit en algunos de los micronutrientes.
  • Posibilidad de mayor número de hospitalizaciones o de permanecer en residencias que puede llevar a realizar una dieta con aporte deficitario de algunos micronutrientes.

Guías nutricionales

  • Energía: De forma individualizada, para mantener normopeso.
  • Proteínas: 0.8 gr/Kg/día repartidas en un 60% de origen animal y 40% de origen vegetal.
  • Hidratos de carbono: 55-60 % de las calorías totales diarias.
  • Grasas: No deben sobrepasar el 30% de la energía total. Con un total del 8% de ácidos grasos saturados.
  • Minerales y vitaminas: Para cubrir las necesidades de este grupo se debe consumir 2-3 raciones de lácteos, más de 2 raciones de verduras y hortalizas y más de 2 raciones de frutas 

La alimentación del niño




Para conseguir un buen estado nutricional en el niño con diabetes, es necesario realizar una dieta siguiendo las normas nutricionales establecidas por su médico, pero a la vez desde el punto de vista de la alimentación, debe ser saludable. El mejor camino para que una dieta sea saludable es la variedad, consumiendo cada día alimentos de todos los grupos que forman el rombo de la alimentación.

Las pautas para una dieta saludable en un niño con diabetes son:
  • Variedad: Cambiar diariamente al escoger entre los diferentes tipos de alimentos que forman cada grupo de las equivalencias.
  • Control del peso: En los niños con sobrepeso para su edad no se debe restringir calorías de la dieta, sino fomentar la actividad física, manteniendo una dieta variada y equilibrada.
  • Moderación en la ingesta de la sal y bebidas refrescantes. En la infancia nunca dar alcohol.
  • Evitar ciertas restricciones como usar productos desnatados, ya que estos en los niños pueden producir deficiencias de vitaminas liposolubles o de ácidos grasos esenciales que puede perjudicar en el crecimiento y desarrollo del niño.


En la dieta del niño cada grupo de alimentos aporta unos nutrientes específicos, así:
  • Lácteos y derivados: Calcio, Proteínas, Vitaminas B, A y D.
  • Carnes, Pescados y Huevos: Proteínas, Grasas, Hierro, Vitaminas B, A y D.
  • Pan, Cereales y Legumbres: Hidratos de carbono, Proteínas, Vitaminas B y Fibra.
  • Frutas, Verduras y Hortalizas: Vitamina C, Folatos, Hidratos de carbono, Fibra y Sales minerales.
  • Aceite y Mantequilla: Grasa, Vitaminas A, D y E

Fiebre y nutrición




La fiebre es uno de los síntomas más comunes y más frecuentes de todas las enfermedades infecciosas. La persona con diabetes, a lo largo de su vida puede sufrir, como el resto de las personas no diabéticas, varios procesos infecciosos que pueden conllevar fiebre y acarrear las repercusiones que este síntoma provoca.

La fiebre suele ir acompañada de un aumento de sed, producida por la pérdida de agua corporal a través del aumento del sudor. Otra característica frecuente relacionada con la nutrición y generalmente asociada a los procesos febriles es la pérdida de apetito.

Las medidas a tomar desde el punto de vista dietético en estas situaciones son las siguientes:
  • Alimentos proteicos, su aporte debe disminuirse de la dieta habitual y en algunas ocasiones puede llegar a suprimirse.
  • Alimentos grasos, el consumo de estos alimentos también se puede reducir y en algún momento eliminar por completo.
  • Alimentos ricos en hidratos de carbono, se debe mantener su aporte sin modificar su cantidad. Deben manejarse adecuadamente las tablas de equivalencias para conseguir el aporte diario de hidratos de carbono de la dieta habitual.
  • Los líquidos, el aporte de líquido debe aumentar y se debe vigilar que sea suficiente para controlar las pérdidas de agua producidas por la fiebre.
El modo más adecuado para aportar los hidratos de carbono mientras dure el proceso febril será fundamentalmente a través de purés, sopas, zumos de frutas y compotas de frutas sin azúcar.

Las raciones de la dieta habitual que se consumen en la dieta diaria en forma de verduras, pueden sustituirse en los casos de fiebre por raciones de purés o de frutas.

Diabetes con patología digestiva



Otra de las patologías más frecuentes en el aparato digestivo que mejoran con cuidados nutricionales son: el estreñimiento, la diarrea y los gases abdominales.


Estreñimiento

Se considera estreñimiento si hay menos de tres deposiciones a la semana. Es más frecuente en el sexo femenino y en los ancianos. Lo padece el 18% de la población. Es útil el aumento de consumo de fibra en cantidades de 20 a 40 gramos diarios. Más de 50 gr./día no aporta beneficios, y puede producir gases abdominales y déficit en la adsorción de minerales y vitaminas.
En las formas leve de estreñimiento es suficiente con aumentar el consumo de frutas con piel, cereales integrales, legumbres y verduras.
En los más severos la fibra se debe dar en forma de suplemento, con las siguientes precauciones: tomar agua en abundancia (al menos 1 litro y medio al día) iniciando el consumo de forma gradual y con varias tomas al día. El beneficio suele observarse tras varias semanas del tratamiento.
Otra posibilidad nutricional es el consumo de alimentos con alto contenido en bífido-bacterias de forma habitual.
También podemos utilizar los alimentos que provocan el reflejo gastrocólico, como tomar en ayunas zumo de naranja o un vaso de agua.
Asímismo conviene evitar el consumo de alimentos refinados por su pobre contenido en fibra y fomentar la actividad física.


Diarrea

Se considera diarrea el aumento del número, fluidez o volumen de las deposiciones. Puede presentarse de manera aguda o crónica, según si duran menos o más de 2 semanas.
En el caso de la forma aguda, primero se debe mantener un reposo absoluto del aparato digestivo de 12 a 24 horas; reponiendo líquidos y electrolitos al iniciar la dieta con alimento bajo en grasa y sin fibra hasta llegar a la dieta habitual, dependiendo de la tolerancia individual. Las comidas deben ser frecuentes y poco copiosas. El consumo de frutas enteras, verduras, legumbres, fritos, grasas animales y hortalizas debe posponerse hasta el final del período de recuperación. Evitar bebidas con cafeína.
En el caso de la diarrea crónica evitar los alimentos ricos en fibra y mantener alimentos ricos en pectinas e hidratos de carbono con escaso contenido en fibra como el arroz.


Gases abdominales

El tratamiento nutricional de los gases abdominales se centran en :
  • Disminuir el contenido de alimentos flatulentos
    • Repollo, coliflor, coles, judías, lentejas, garbanzos, pepinos, zanahorias, manzanas, plátanos, pasas, manzanas, salvados y galletas.
    • Edulcorantes artificiales: sorbitol y manitol
    • Alimentos ricos en grasas: salsas, frituras y carnes grasas
    • Si se sospecha de déficit de lactosa: leche, helados, nata
  • Corregir hábitos deglutorios deficientes:
    • Degluciones de aire muy frecuentes causadas por:
      • Dentaduras incorrectas
      • Consumo de chicles o tabaco
      • Beber a pequeños sorbos
      • Comer muy deprisa
      • Aspirar alimentos o bebidas con paja
      • Adoptar el decúbito despues de comer
  • Otras medidas:
    • Evitar la inactividad
    • Disminuir el estrés
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Reflujo gastroesofágico

Puede aparecer con todo el cortejo de sintomatología o solo alguno de sus síntomas. Cuando el contenido del estomago pasa (reflujo) al esófago, la molestia que produce más frecuentemente, es la sensación de ardor o quemazón, localizado detrás del esternón y que se relaciona con ciertas posturas.
Para mejorar esto tenemos ciertas medidas higiénico y dietética y debemos:
  • Evitar comidas copiosas
  • No saltarse nunca la media mañana ni la merienda
  • Evitar los cítricos
  • Evitar el café
  • No echarse la siesta
  • Acostarse después de dos horas de la cena
  • Evitar el consumo de menta, canela, ajo, cebolla, pimienta y alcohol
  • Evitar bebidas carbonatadas
  • Evitar las frituras de tomate
  • Evitar alimentos muy calientes o fríos
Mantener el perfil calórico y de nutrientes indicados en su dieta de la diabetes mellitus, pues los hidratos de carbono producen una estimulación de la gastrina cuya acción es producir un aumento de la presión del esfínter esofágico con lo que se logra disminuir el reflujo.


Úlcera gastroduodenal

Las observaciones nutricionales para mejorar la ulcera gastroduodenal han sufrido cambios durante los últimos años, en la actualidad las podemos agrupar en:
  • Evitar todas las dietas estrictas que aparecen diariamente. Estas dietas no mejoran la úlcera y sí pueden alterar el control metabólico de la diabetes e incluso producir riesgo nutricional
  • Mantener el reparto de las comidas entre cinco o seis tomas diarias, según la dieta previa para la diabetes
  • Evitar comidas copiosas
  • Evitar el café con o sin cafeína
  • Evitar el té
  • Evitar el alcohol
  • Mantener el consumo elevado de grasas poliinsaturadas
  • No evitar el uso de lácteos en general y en especial de los lácteos fermentados por su efecto sobre el Helicobacter.